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La atención que se brinde en los minutos y las horas inmediatamente posteriores a un accidente cerebrovascular es fundamental. Cuando un médico no diagnostica correctamente un accidente cerebrovascular, el tiempo perdido para administrar el tratamiento adecuado podría ser devastador para el paciente. El daño puede ser permanente e irreversible si el accidente cerebrovascular no se identifica y se trata de manera oportuna.

Podría provocar daño cerebral, trastornos del habla, parálisis o incluso la lamentable muerte de un ser querido. El diagnóstico incorrecto de este tipo de accidente podría considerarse una mala praxis médica si el incumplimiento del estándar de cuidado por parte del médico le ocasiona daños al paciente.

Los accidentes cerebrovasculares son una de las principales causas de muerte en Estados Unidos. En 2020, 1 de cada 6 muertes por enfermedades cardiovasculares fueron causadas por accidentes cerebrovasculares.  Cada año, alrededor de 795,000 estadounidenses sufren de un accidente cerebrovascular. Sin embargo, en las salas de emergencia de Estados Unidos, es habitual que no se diagnostiquen de manera correcta, lo que ocurre en 1 de cada 10 casos.  Aunque no todos los diagnósticos erróneos se deben a una mala praxis médica, algunos sí. 

Si usted o un ser querido sufrieron un accidente cerebrovascular diagnosticado de manera incorrecta, podrían tener derecho a una compensación significativa por las lesiones que hayan sufrido. Un abogado con experiencia en mala praxis médica sabrá cómo tramitar el caso y luchar para que obtenga la indemnización monetaria que necesita para cubrir sus necesidades médicas a corto y largo plazo. 

¿Qué es un accidente cerebrovascular?

Un accidente cerebrovascular se produce cuando el flujo sanguíneo del cerebro se obstruye de alguna manera. Como consecuencia, el cerebro no recibe el oxígeno y los nutrientes necesarios que se transportan a través de la sangre. Sin estos nutrientes ni el oxígeno, las células del cerebro comienzan a morir con rapidez, incluso en cuestión de minutos. Algunos accidentes cerebrovasculares son causados por una hemorragia repentina en el cerebro que podría dañar las células cerebrales.

Los accidentes cerebrovasculares son emergencias médicas que requieren intervención médica inmediata. Los médicos y otros proveedores de tratamiento están capacitados para detectar los signos de un accidente cerebrovascular, pero a veces se pasan por alto. El hecho de pasar por alto estos signos se considera mala praxis médica, y las víctimas de un accidente cerebrovascular no diagnosticado de manera correcta podrían tener derecho a una compensación.

Tipos de accidentes cerebrovasculares

Existen tres tipos principales de accidentes cerebrovasculares.

1. Accidente cerebrovascular isquémico: Este es el tipo más común de accidente cerebrovascular. Se produce cuando los vasos sanguíneos del cerebro se estrechan u obstruyen. La obstrucción disminuye o elimina el flujo sanguíneo del cerebro. Generalmente, la causa son depósitos de grasa en la sangre o coágulos de sangre que circulan por el torrente sanguíneo. Un accidente cerebrovascular isquémico puede ocasionar daños importantes en el cerebro de la persona.
2. Accidente cerebrovascular hemorrágico: Este tipo de accidente se produce cuando un vaso sanguíneo del cerebro se rompe o sufre una fuga. La sangre en el cerebro puede dañar e incluso matar las células cerebrales. Esta forma de accidente cerebrovascular suele deberse a una elevada presión arterial, un tratamiento excesivo con anticoagulantes, un traumatismo en un accidente automovilístico o incluso un accidente cerebrovascular isquémico que provoca una hemorragia.
3. Accidente isquémico transitorio (AIT): Este tipo de accidente suele denominarse “mini accidente cerebrovascular”. Se trata de una serie de síntomas temporales que son muy similares a un accidente cerebrovascular. Esta forma de accidente cerebrovascular no provoca daños permanentes y suele deberse a una disminución temporal de sangre en una parte del cerebro de la persona. Podría durar apenas cinco minutos, pero también podría durar más. Incluso un AIT es peligroso y requiere un tratamiento médico inmediato.

¿Cuáles son las señales de advertencia de un accidente cerebrovascular?

Existen muchas señales de advertencia. El personal médico debe reconocer estos síntomas y diagnosticar con precisión a un paciente que los sufre. Si el personal no identifica de manera correcta dichos síntomas ni diagnostica un accidente cerebrovascular, podría violar el estándar de cuidado esperado y ser objeto de una reclamación por mala praxis médica. 

Las señales de advertencia de un accidente cerebrovascular podrían ser las siguientes:

• Confusión repentina, problemas de comprensión o de habla
• Dolor de cabeza intenso repentino sin ninguna causa aparente
• Dificultad repentina para ver con uno o ambos ojos
• Debilidad o adormecimiento repentinos en el rostro, la pierna o el brazo (sobre todo si el adormecimiento se produce en un lado del cuerpo)
• Pérdida repentina del equilibrio y la coordinación
• Mareo o dificultad para caminar repentinos

Si un paciente presenta cualquiera de estos síntomas, debe solicitar atención médica de inmediato. Sin embargo, la triste verdad es que los pacientes deberían esperar que los médicos reconozcan estos síntomas si se manifiestan. 

Cómo se produce un diagnóstico erróneo de un accidente cerebrovascular

Un diagnóstico rápido de un accidente cerebrovascular es fundamental para evitar los efectos más graves. El problema es que, muchos centros de emergencias no tienen el personal adecuado o no tienen la formación adecuada para reconocer estos síntomas. Tal vez los médicos están apresurados y pasan por alto señales evidentes que podrían evitar daños a largo plazo de un accidente cerebrovascular si se detecta a tiempo.

La mala praxis médica suele deberse a las siguientes acciones u omisiones:

• No registrar de manera correcta el historial clínico del paciente;
• No realizar una examinación física del paciente en la sala de emergencias;
• No administrar anticoagulantes al paciente;
• Administrar de manera excesiva anticoagulantes al paciente que sufre el accidente;
• El hecho de que el médico clasifique el accidente cerebrovascular como otra enfermedad;
• No administrar al paciente un activador del plasminógeno tisular (tPA), un medicamento eliminador de coágulos que puede detener un accidente cerebrovascular si se administra de manera oportuna;
• Cirugías incorrectas o errores quirúrgicos, que podrían causar hipertensión.

A pesar de que deberían detectar estos síntomas, existen otras razones por las que un médico u otro profesional podrían pasarlos por alto. Una mala formación o personal inadecuado también podrían ser factores.

Cómo un abogado identifica una mala praxis médica

No todos los accidentes cerebrovasculares diagnosticados de manera incorrecta se consideran mala praxis médica, pero muchos sí. La mala praxis médica se produce cuando el tratamiento que brinda un médico u otro profesional médico al paciente es inferior al estándar de cuidado médico aplicable. No se trata de un mero error ni un diagnóstico erróneo, sino de un error de criterio o una omisión que se encuentra por debajo del estándar esperado de un profesional médico similar en la misma situación.

El estándar de cuidado podría variar según diversos factores. Al determinar si el diagnóstico erróneo de un accidente cerebrovascular se considera mala praxis médica, el abogado tendrá en cuenta los siguientes factores:

• La formación, los antecedentes y la experiencia del médico 
• Si el médico recibió formación especializada en la identificación y el tratamiento de los accidentes cerebrovasculares
• El lugar donde se brindó el tratamiento médico (por ejemplo, sala de emergencias, hospital, consultorio médico local)
• Los síntomas que ha manifestado el paciente y si deberían identificarse como propios de un accidente cerebrovascular 
• Las circunstancias en torno al diagnóstico erróneo (hospital con personal insuficiente, entorno de una sala de emergencias, la claridad de los síntomas)

Compensación en un caso de diagnóstico erróneo de un accidente cerebrovascular

Una reclamación por mala praxis médica tiene como objetivo solicitar una compensación para el paciente afectado. Cuando un profesional médico no diagnostica de manera correcta un accidente cerebrovascular, los daños podrían ser graves. Cuando ocurre esto, la compensación por aquellas lesiones podría ser sustancial. En los casos de mala praxis médica, la compensación monetaria suele clasificarse en dos categorías.

Daños económicos por el diagnóstico erróneo de un accidente cerebrovascular

Los daños económicos dan derecho a una indemnización monetaria con un valor fácilmente determinable. La compensación suele incluir lo siguiente:

• Gastos médicos anteriores y futuros
• Costos de rehabilitación y servicios de tratamiento permanente
• Pérdida de ingresos o pérdida de la capacidad de generar ingresos debido al accidente cerebrovascular
• Costos de servicios o modificaciones por una posible discapacidad

Daños económicos por el diagnóstico erróneo de un accidente cerebrovascular

No es fácil asignar un valor a este tipo de daños, ya que son más subjetivos. A pesar de su subjetividad, suelen representar una parte sustancial de la compensación de una víctima de un accidente cerebrovascular mal diagnosticado en una reclamación exitosa por mala praxis médica. Estos suelen incluir lo siguiente:

• Dolor y sufrimiento
• Pérdida de la compañía y el apoyo
• Pérdida del disfrute de la vida
• Daños por homicidio culposo

El monto de la compensación que corresponda en cada caso variará según las circunstancias específicas del caso. Un abogado especializado en diagnósticos erróneos de accidentes cerebrovasculares podría identificar la posible compensación en el caso de un cliente y luchará por el máximo monto posible.

Cómo puede ayudar Rosenblum Law

Los diagnósticos erróneos de accidentes cerebrovasculares pueden provocar lesiones graves, costos médicos y de atención elevados, pérdida de los ingresos y trauma emocional. Los efectos duraderos o incluso permanentes de las lesiones de un diagnóstico erróneo de un accidente cerebrovascular pueden cambiar para siempre la vida de la víctima. Cuando este diagnóstico erróneo se debe a una mala praxis médica, el médico u otro proveedor médico debe ser responsable financieramente de su negligencia.

Nuestros abogados de Rosenblum Law altamente especializados en mala praxis médica entienden la situación que atraviesa la víctima y su familia. Contamos con las décadas de experiencia necesarias para tramitar estos casos médicos complejos. Brindamos una representación eficiente y personalizada a cada cliente y obtendremos la máxima compensación que usted merece. Nuestros abogados han ganado millones de dólares para nuestros clientes, y utilizaremos nuestros amplios conocimientos en este tipo de casos para beneficiarlo. Comuníquese con nosotros en línea o llámenos al 888-815-3649 para recibir una primera consulta gratuita de su caso. Estamos dispuestos a ayudarlo en este tiempo difícil.